En el mundo del cuidado de servidores, no hay espacio para errores, y eso lo tengo muy claro. Cada día realizo análisis de rendimiento, busco posibles vulnerabilidades y me encargo de hacer copias de seguridad. Siempre he sido muy cuidadoso con mi entorno de trabajo, y mi escritorio es prueba de ello: organizado y con todo lo necesario a mano. Me gusta pensar que mi habilidad para mantener todo en orden me permite ser más eficiente en mi trabajo.