Durante mucho tiempo, el insomnio me atormentaba. Intenté de todo, pero nada parecía funcionar hasta que probé la terapia online. Mi terapeuta me enseñó técnicas de relajación y manejo de pensamientos intrusivos que, poco a poco, me devolvieron el sueño. Hoy, duermo mejor que nunca y siento una paz mental que había olvidado.